14/2/13

Padres comprometi​dos: el recurso secreto en la educacíón de los hijos - Servicio de Noticias - Padres y Madres del IES Fuentesnue​vas

A pesar de que diariamente los padres mandan sin falta a sus hijos a la escuela y esperan que les vaya bien, pueden agregar un ingrediente adicional que dará un fuerte impulso al éxito del niño. La participación de los padres es el ingrediente que hace la diferencia. La participación activa de los padres en la educación de sus hijos, tanto en el hogar como en la escuela, trae muchos beneficios y tiene un impacto significativo en la vida del niño. Según estudios de investigación, los niños de padres comprometidos:
faltan menos;
se comportan mejor;
tienen un mejor desempeño académico desde los años preescolares hasta la escuela superior;
continúan con sus estudios escolares;
van a mejores escuelas.
La investigación demuestra también que un entorno hogareño en el que se fomenta el aprendizaje es aún más importante que los ingresos, el nivel de educación o los antecedentes culturales de los padres. Al participar activamente en la educación de sus hijos, tanto en el hogar como en la escuela, los padres envían mensajes importantes a sus hijos. Les demuestran que se interesan por las actividades que realizan y refuerzan la idea de que la escuela es importante.
Cómo comprometerse y participar– Preparando el terreno en los primeros años escolares
La realidad es que algunos padres tienen más tiempo que otros para participar, pero es importante que aun los padres muy ocupados examinen sus prioridades y se hagan un tiempo, aunque sea corto. Algunas escuelas están intentando trabajar con horarios más flexibles para que los padres que trabajan tengan más opciones. La Asociación Nacional de Educación (National Education Association) de los Estados Unidos recomienda algunas maneras específicas en que los padres pueden participar en la educación de sus hijos.
En el hogar: 
Léales a sus hijos. Leer en voz alta es la actividad más importante que pueden hacer los padres para aumentar las posibilidades del niño de leer correctamente.
Converse sobre los libros y las historias que lee a su hijo. 
Ayude a su hijo a organizar su tiempo.
Ponga un límite a la cantidad de horas de televisión que pueden ver durante los días de semana.
Hable con su hijo regularmente sobre lo que ocurre en la escuela.
Revise la tarea cada noche.
En la escuela: Reúnase con la maestra u otros miembros del personal de la escuela para determinar dónde se necesita ayuda, cuándo y cómo; y fíjese dónde esto coincide con sus intereses. Ofrezca voluntariamente su tiempo. Los padres pueden:
ser ayudantes en el salón de clases;
dar clases particulares o leer con niños en forma individual; 
ayudar a los niños con necesidades especiales; 
ayudar en los laboratorios especiales, como el de computación o ciencias;
planificar y trabajar para recaudar fondos;
planear y acompañar a los estudiantes en los paseos escolares;
asistir a los entrenadores en eventos deportivos;
asistir con los proyectos de manualidades y arte;
ayudar en algún club de intereses especiales o grupo de teatro;
hablar a la clase sobre su carrera o área de especialización; 
ayudar a escribir comunicados de prensa y artículos sobre las noticias locales;
desempeñarse como asistente de la biblioteca y ayudar en la "hora del cuento".
Las posibilidades son infinitas.
Vote en las elecciones para la junta escolar. Sepa qué proponen los candidatos.
Participe en las asociaciones de padres y maestros, y en las decisiones escolares.
Ayude a su escuela a fijar estándares académicos altos.
Transfórmese en defensor de una mejor educación en su comunidad y estado.
No deje de participar: Los años de la escuela media y superior
Durante la adolescencia, los niños se hacen más independientes y en general no desean que sus padres estén en la escuela. Los alumnos de la escuela intermedia y superior deben enfrentarse a más materias y más maestros de una manera más impersonal, por eso la participación de los padres, aunque menos directa, sigue siendo importante. Los padres pueden participar en eventos escolares, revisar la tarea, aportar experiencias y materiales que complementen el trabajo en el curso, y ayudar al niño con estrategias de organización. Los padres pueden influir en el progreso académico de sus hijos mediante el apoyo y el refuerzo, y sirviendo de modelos. Los niños aprenden de los estilos de aprendizaje y las actividades propias de los padres como discusiones, lectura de periódicos y otros materiales, hábitos televisivos y otras fuentes de información y conocimiento.
Vale la pena que los padres se involucren
Cuando los padres aportan su esfuerzo y tiempo, tienen la oportunidad de interactuar con los maestros, los administradores y otros padres. Pueden aprender por sí mismos sobre las actividades diarias y la cultura social de la escuela, que le permitirán comprender cómo es la escuela de su hijo.
Tanto el niño como la escuela se benefician, y los padres sirven como ejemplo al demostrar cuán importante es la participación de la comunidad. Además de mejorar el rendimiento académico, la participación de los padres da resultado de otras formas igualmente significativas. Numerosos estudios han demostrado que la participación de los padres es un factor de protección contra el uso del tabaco, la depresión, los trastornos de alimentación, el rendimiento académico y otros problemas de los adolescentes. Al mantenerse involucrado con sus hijos pequeños y adolescentes, los padres pueden ser una fuente de apoyo, crear un clima que permita tratar temas difíciles y servir de ejemplo para una conducta responsable y de compromiso.


Noticia publicada el 14/02/2013 en la categoría Información general (Información general).